5 de junio de 2009

TIP 10: LA HORA DE BAÑARSE

El primer baño se realiza una vez caído el cordón umbilical, momento en que estará la familia presente ante el llanto del bebé que seguramente surgirá ni bien entre en contacto con el agua.

Recordá que debés utilizar jabón de glicerina sin perfume.

¿Dónde bañarlo?, te cuento mi experiencia personal. Con el primero tuve un catre bañera / cambiador que me dio muchísimo resultado como cambiador pero como bañera era medio incómodo el tema de tener que llenarlo, vaciarlo y secarlo para luego plegarlo. Mi solución fue sencilla: “La pileta de la cocina”. Ahí los bañaba hasta ya poder hacerlo directamente en la bañadera.

Pero con el cuarto, una vez que se sentó solito de manera firme (alrededor de los siete meses), compré la típica bañera de plástico para poner dentro de la bañera y realmente fue lo que mejor resultado me dio porque el ser para niños, el tamaño es el apropiado y tienen mucha más contención que en una bañera de adulto.

Vuelvo a decirte que esta es mi experiencia personal pero creo que me hubiera encantado también usar los adaptadores que existen para poner con ventosas en la bañera de un adulto, lo cual te permite economizar espacio y tenerlo seguro.

De todos modos es difícil que te alejes de su lado por más seguridad que creas tener porque siempre encontrarán el modo de hacerte pegar un buen susto, cosa que los niños son propensos a hacer. Los accidentes caseros lamentablemente son muy frecuentes y a veces se producen en un segundo de distracción estando vos al lado.

Cuando saques a tu bebe del agua, una vez sequito, ponele bastante talco o fécula en la entrepierna, en los rollitos, en las axilas, en el cuello, en los genitales del varón, o sea toda zona húmeda para evitar el paspado y además dejarle ese olorcito típico del bebé. En definitiva como yo les decía a mis hijos: “vamos a hacer ñoquis ...”.


Pupy

13 de marzo de 2009

TIP 9: CONTROLES MEDICOS


La primer visita al pediatra deberás tener que hacerla en la primera semana de vida del bebé, esto es lo que mayormente te recomiendan los médicos.


Si ya conocés un pediatra seguro recurrirás a él o ella, de lo contrario es conveniente que consultes antes del parto la cartilla de la obra social para ver si tenés un pediatra cerca de casa, cosa bastante conveniente, y si es posible hacerle una visita estando todavía embarazada para que te vaya guiando en como manejarte esos primeros días antes de llevarlo al primer control.


Cuando vayas al pediatra, normalmente debes ir relajada y con tiempo suficiente dado que además de los turnos dados, siempre se presentan chiquitos con alguna urgencia que probablemente a vos te pasarán también.


Los controles pediátricos son mensuales para ver como va creciendo tu hijo, saber que vacunas debes darle, que tipo de alimentación incorporarle, etc.


Te recomiendo anotar la altura y el peso que va adquiriendo según su tiempo de vida ya que luego tendrás más hijos o sobrinos y siempre es lindo saber como era el tuyo en ese momento, además de saber si está creciendo y engordando bien, cosa que evaluará el médico.


Algo que hacía mi mamá y yo adquirí es anotar las fechas y enfermedades padecidas, hablamos de paperas, rubéola, sarampión, etc. Este es un dato que a veces te solicitan, y si no las anotaste en su momento luego vienen las confusiones: ¿era sarampión o rubéola?, ¿la tuvo Juan o José?, etc.


Con respecto al dentista, su primer control debe ser a los 3 años aproximadamente, pero el hábito de lavarse los dientes yo se los enseñaba a partir de aproximadamente los dos años. Este tema deberás consultarlo con el pediatra porque yo aquí te cuento todo desde mi experiencia personal.

28 de noviembre de 2008

TIP 8: Ropa

Lo primero que te va a decir tu pediatra es que evites la ropa de color para el bebé, por lo menos la que va a estar en contacto con su piel por el tema de las tintas que esas prendas pueden tener.


Es por eso que preferentemente elegí ropa blanca o amarillo patito que además si no conocés su sexo te van a servir. Igualmente te podés jugar con algo celeste o rosa pues dicen que al varón ponerle algo rosa le trae suerte y a la nena el celeste le queda muy lindo.

 


Tratá al elegir su ropa que esté confeccionada con telas suaves, siendo el algodón lo más cómodo. Recordá que la ropa del bebé, por lo menos hasta los tres meses, la debés lavar antes de estrenarla y para eso podés usar preferentemente el simple pan de jabón o esos productos destinados a la ropa de bebé.

 


Hay un elemento infaltable en el ajuar de tu bebé que son los “pechitos”. Esta prenda te permite tener el cuerpecito abrigado sin necesidad de cubrirle las mangas con lana. Sobre todo es excelente si tenes un ambiente cálido, porque está cómodo y abrigadito, solo le ponés una remerita manga larga y este famoso pechito. Seguro habrá una abuela, tía habilidosa o quizás vos misma que pueda hacerlo, es por eso que te adjunto un dibujo como para que te des idea de cómo confeccionarlo.



Trata de tener siempre un cardigan o chaleco con botones bastante grueso para cuando lo tenés en casa con pechito o remera manga corta y manga larga (que es otra opción para tenerlo abrigado sin lanas dentro de casa) y tenés que salir de pronto a comprar algo que te faltó o simplemente querés dar una vueltita corta y sabemos que cambiarle el atuendo por dos segundos que vas a salir es más perdida de tiempo en eso que lo que vas a tardar, y ahí es cuando le ponés el cardigan y la campera. Esta bien abrigadito, no lo cambiaste y salís tranquila. Cuando volvés le sacás campera y chaleco y otra vez cómodo en casa.

 


Si vas a comprarle ropa, el elemento indispensable hasta te diría los dos años, siempre que encuentres talle porque no vienen hasta más de ese tiempo, son los enteritos que se ajustan abajo, en la entrepierna. Son vitales porque de esta manera no se destripa (como vulgarmente decimos). Es con ellos que siempre tienen la pancita abrigada. Los modelos te permiten todas las posibilidades: musculosa (para verano y para usar tipo camiseta en el invierno), manga corta, con cuellito tipo chomba (que además quedan preciosos al salir dejando ver el cuello por sobre un bucito), manga larga, etc.  Sirven para salir, para dormir, para estar en casa. Además son muy prácticos para el cambio del pañal.

 


También están los pijamas enterito. Si buscás hay talles grandes como para 3 años y ¿sabés porqué son muy prácticos?, porque cuando son más grandecitos tienden a destaparse y vos sabés que aunque la temperatura baje, con esos ositos están algo abrigados y todo el cuerpito tapado.

 


Consejo práctico: Cuidado al planchar los enteritos o remeras que tienen el broche plástico porque a mí me ha pasado y a amigas también, que al acercar la plancha a esos ganchitos el calor los funde, aunque sea un poquito cerca, y lo que pasa es que se queman (se aplastan al fundirse)  y no te abrochan más.

¿Cómo hacer entonces? Evita la plancha en esa zona.


 

Una pregunta que me hicieron una vez es ¿hasta cuando hay que lavar la ropita del bebé separada del resto?. Y bueno, yo hice siempre lo siguiente: hasta los tres meses más o menos, lavé sus ropitas y sábanas separadas del resto de la familia.

Primero porque existen productos para lavar la ropa del bebé que no son tan fuertes como los jabones en polvo comunes y además su ropita es tan chiquita que la podés lavar rápido sin necesidad de esperar a una carga de lavarropas con bastante ropa. Otro tema es el considerar que los bebés chiquitos suelen ensuciarse con facilidad, sobre todo cuando le estás cambiando el pañal, y la ropa la necesitas para otra posible emergencia.

 


Te voy a hacer una sugerencia con respecto al talle de la ropa. Por lo general los talles están realizados de tal manera que si dice para 1 año, vos considerá que la va a poder usar desde los 9 a 18 meses aproximadamente. Siempre dependerá del tamaño del bebé porque puede ser regordete y cortito o flaco y largo.

Mi sugerencia es la siguiente: si le tenés que comprar una prenda para usar esa temporada, tratá que le quede bien, sin apretar obviamente. A lo que voy es que no le quede grande porque de esa manera no la luce porque le queda enorme y cuando llega el momento que le queda bárbaro resulta que ya está gastada o tiene mucho uso.

Por supuesto esto no corre si le estás comprando ropa para más adelante aprovechando una liquidación. Las liquidaciones de fin de temporada te las recomiendo porque los chiquitos te permiten estimar que si ahora está usando un talle 2, por ejemplo, la temporada próxima necesitará un talle 4. Te digo que los chiquitos lo permiten porque a veces un talle 6 ya puede ser que lo mantenga más de 1 año y además es probable que ya él o ella manifiesten sus gustos por algún color en especial o algún dibujo en especial. Cuando son chiquitos somos nosotras las que decidimos con referencia a esos temas.

 


Para la ropa de cuna te recomiendo unas sábanas que compré una vez que son de algodón y ajustables. Son bárbaras.

Las sábanas las podés hacer porque son muy chicas y la frazada si no podés comprarla la podés hacer con tela polar.

Esta mantita polar la podés utilizar también cuando vas de visita a una casa y se hizo de noche y el bebé está dormido. En ese caso para no tener que vestirlo todo (si es que vas cerca o vas en auto) cuando te tenés que ir, lo cubrís con esa mantita y listo.

 


Con respecto al calzado del bebé, yo te recomiendo para que use hasta el momento en que empiece a gatear, usar lo que yo llamo “pininos”. Esto no es otra cosa que el consabido escarpín pero con un elástico a la altura del tobillo que le da la apariencia de un mocasín.

 


 

Es una prenda cómoda y práctica que tanto puede ser de hilo como de lana.

Una vez que empiezan a gatear ya no les sirven porque necesitan algo que no les patine. En ese caso ya tenés opciones como las medias que tienen goma en la suela o quizás ya encuentres una zapatilla chiquita.

 


Y hablando de zapatillas te recomiendo probárselas antes de comprar porque hay modelos que quizás a tu bebé no les sirvan por la altura del empeine. La famosa “empanadita” que tienen como pie te puede jugar una mala pasada y no encontrar fácilmente un modelo en el cual su piecito entre cómodo.

A mí me ha pasado recibir una vez de regalo unas hermosas zapatillas para uno de mis hijos y no poder usarlas porque el pie no le entraba y daba la casualidad que esa casa solo comercializaba esa marca, resultando que no me sirvieron.

 


PUPY CUERDA

14 de noviembre de 2008

TIP 7: Las salidas con el bebé

Primero te recomiendo dejar en las casas de visita habituales uno o dos pañales y algún chiche de su agrado, sobre todo si es casa de abuelos donde quizás, con un poco de suerte, se quede a dormir o pase varias horas, en ese caso también te recomiendo dejar un chupete y uno o dos cartoncitos de leche que como tienen fecha de vencimiento bastante prolongada solo debes controlar cada tanto que no estén a punto de vencer.


 

No permitas que por cuestiones de clima dejes de hacer cosas importantes para vos o simplemente distraerte. No te frenes si hace mucho frío o hay mucho viento (estamos hablando de situaciones normales, mucho frío en invierno, mucho calor en verano, me refiero a que si hay un tornado o hacen 40º mas te vale quedarte tranquila).



Si hace mucho frío, ponele todo el abrigo necesario y si además hay mucho viento, poné al cochecito las capotas plásticas que ahora existen y son una bendición.


PUPY CUERDA

12 de noviembre de 2008

TIP 6: Consejos a la hora de la Teta

Dar la teta a tu bebé es el momento más hermoso que hay. Esos ojitos que te buscan son impagables. Por supuesto que cuando es de madrugada mucha gracia no te hace, pero todo pasa y ese requerimiento se va dilatando con el tiempo.

Buscá siempre una posición que te sea cómoda, ya sea sentada en un sillón o recostada en la cama. Muchas veces me ha pasado el quedarme dormida con el bebé prendido a la teta durante la noche, esto sé que no es muy conveniente porque podés, sin querer, hacer daño al bebé, sé muy cuidadosa con esto.

Durante el primer tiempo es seguro que luego de mamar haga sus necesidades y deberás cambiarlo aunque sean las 4 de la mañana, pero si no lo hizo yo no los cambiaba, es por eso que a la hora de dormir siempre es conveniente, si usas pañales descartables, elegir uno bien bueno para la noche. Además lo que te puede pasar si decís, ya mamó y ahora lo cambio aunque no haya hecho una deposición, es que al ratito, una vez cambiado, llegue la sorpresa y lo único que lograste es malhumorarte y gastar un pañal.

Te cuento, aunque seguramente te lo dirán en el sanatorio o el propio pediatra, la manera de desprender al bebé de la teta. Deberás poner tu dedo índice entre el pezón y su boquita, logrando de esta manera un efecto sopapa que liberará su boca.

Para que tengas en cuenta te digo que el bebé suele transpirar cuando toma la teta, más todavía si es verano, por lo tanto te recomiendo sacarle un poco de abrigo en ese momento, de lo contrario verás como su cabecita empieza a sudar y se pone un poco molesto.


¡Consejo de la abuela!, nunca lo pude comprobar fehacientemente pero no es ilógico. Dicen que poniendo en el moisés o cuna del bebé durante la noche una prenda materna, tranquiliza al bebito.


Esto es por el olor a mamá y a la leche, por lo tanto te aconsejo poner a la tardecita un pañuelo o toallita cerca de tu pecho y a la noche cuando te vas a dormir colocalo a un costadito de su cama.

PUPY CUERDA

9 de noviembre de 2008

TIP 5: El Moisés y la Cuna

Tenés que tener en cuenta al momento de preparar estos elementos, que el uso del moisés es de aproximadamente 4 ó 5 meses, más o menos, por lo tanto a partir de ese momento necesitás la cuna.

Conozco gente que obvió el uso del moisés y utilizó directamente la cuna.

El moisés se fue modificando con el paso del tiempo. Incluso yo, que no me creo tan pero tan mayor, he usado muchos modelos para mis hijos. El que usó el mayor de ellos era de mimbre pero con un pie que tenía un cabezal alto del cual caía el tul hacia ambos lados. Muy principesco realmente, incluso para la época dado que ninguna de mis amigas tenía uno así, pero me lo habían ofrecido y mi santa madre lo ornamentó todo, utilizando el tul de mi vestido de novia, además como dato adicional tenía la opción de volverse mecedora. Para el segundo bebé utilizamos el mismo moisés de mimbre pero apoyado en una base común y sin ningún tul. Resulta lo más cómodo.

PUPY CUERDA

TIP 4: El cochecito de paseo


Si por razones de trabajo o cualquiera sea el motivo, vas a necesitar trasladarte en colectivo, tren o subte, te recomiendo comprar el modelo paragüita ya que lo podés cerrar con facilidad y ocupa poco lugar.

Sobre todos los demás modelos solo te recomiendo que te fijes que tenga:

·         Buena suspensión (las callecitas de Buenos Aires tienen ese que se yo ...)

·         Posibilidad de acostarlo en caso de dormirse

·         Cinturón de seguridad (que usarás primero para que no se caiga y segundo para que no se deslice y se baje cuando es más grandecito)

·         Traba de frenado

 

Y ya como una exquisitez, me parecen geniales los cochecitos que te permiten circular con el bebé mirándote a vos o mirando hacia delante. Digo exquisitez porque supongo que no han de ser de los más económicos, pero bueno  ... uno nunca sabe.

 

Eso sí, consejo indispensable, comprar la capota plástica para cochecito, que te permite protegerlo si llueve, o contra el viento si es muy fuerte o hace mucho frío. Esto lo descubrí no hace mucho y la primera vez que lo vi dije: ¡Ese chico se va a ahogar, como le ponen ese plástico encima!, luego vi más y más hasta que me tocó a mí el último embarazo y analicé ese elemento y me di cuenta que es super útil y por eso te lo recomiendo.


PUPY CUERDA

TIP 3: El bolso de paseo


Debés tener, dependiendo de las horas que estés fuera y del tiempo del bebé (si es chiquitito más pañales), al menos 2 pañales. Talco y toallitas para higienizarlo. Una muda de ropa de repuesto. Un abrigo. Un chupete extra. El cambiador por si lo tenés que apoyar sobre una superficie que no te inspire confianza de pulcritud. Un vasito o mamadera chica para beber algo. Una mamadera y una leche. Un babero o toallita de mano.


Atención, tenés que tener siempre una de las tijeras chiquitas a mano para poder abrir los cartones de las leches.


Algún elemento de su agrado de tamaño pequeño y que no pese mucho, por si necesitás que se entretenga un ratito.


Te cuento algo que a lo mejor adoptás. Yo siempre tenía en su bolso una sabana de su cuna. Te preguntarás porqué, y bueno la razón es sencilla, si tenía que acostarlo en una cama así sea en la casa de un familiar, siempre consideré conveniente que su rostro esté en contacto con una sábana suya por más limpia que siempre consideré las casas a las cuales concurrí. Es una cuestión de sentido común el pensar que los adultos estamos más propensos a contagiarnos o incubar alguna enfermedad común (resfrío, etc.), que para un bebé puede tornarse siempre un poco más complicada.


PUPY CUERDA

TIP 2: Que tener para el regreso del sanatorio?

Como primera medida tenés que tener pañales. Gracias a Dios tenés gran variedad de pañales descartables (me refiero a calidad y precio). Ya escucharás que te dirán: ¡Vos sí tenés suerte porque antes eran de tela y había que lavarlos, plancharlos, hervirlos cada tanto y hasta almidonarlos (esto ya muy viejo)!. Es verdad, pero yo no me considero tan mayor y sin embargo cuando nació mi primer hijo, por razones económicas alternaba entre pañales de tela y bolsones de pañales descartables de segunda calidad, que había que revisar uno por uno porque eran 100 y tenían diferentes fallas.


Indefectiblemente, volviendo al tema que nos ocupa, deberás tener pañales del talle RN (Recién Nacido). Como mínimo tendrías que tener 4 paquetes ya que debés considerar que gastará más o menos 6 pañales por día. El tema es tener todo listo para que vos tengas tiempo de ponerte fuerte y bien esos primeros días sin necesidad de preocuparte por estas cosas que, con anterioridad podés resolver. Luego si te hacen falta más, podrás salir de paseo con el bebé a comprar más o quizás el bebé sea más grandecito que el tamaño que abarca un talle RN y puedas cambiar al P (Pequeño). Si bien los pañales indican en el envase el kilaje del niño al que pertenece ese modelo, a veces el bebé es bastante largo y le queda muy bajo, entonces es preferible comprar un talle más grande aunque no corresponda a su peso, eso sí, en ese caso perderás en cantidad de pañales ya que cuanto más grande sea el tamaño menor cantidad de pañales trae pues se sobreentiende que los cambios serán cada vez más espaciados. Todo esto lo veremos igualmente cuando toquemos ese tema. El tamaño que vayas comprando lo vas a ir viendo sobre la marcha y probablemente irás probando como hicimos todas.


Te recomiendo preparar una canastita con todos los productos que vas a necesitar este primer tiempo, porque son varias cosas y te permite tenerlas concentradas en lugar.


Deberás tener aceite u óleo calcáreo (que es más barato), algodón, talco o almidón de maíz (que es mucho más barato y tiene el mismo efecto), jabón de glicerina (sin perfume) para bañarlo una vez caído el cordón umbilical y un cambiador para apoyarlo sobre el lugar donde lo vayas a cambiar (cama, mesa, etc.). Esto es lo prioritario para el primer mes por lo menos.


Luego podrás poner hisopos, perfume (cuidado, como me dijo uno de los peluqueros en un sanatorio, no le pongas perfume en su cabecita cuando está recién pelado), shampoo, cepillo para el pelo, alicate, otro chupete, sujeta chupete (son preferibles los que tienen un broche para sujetar en la ropa), y un elemento odiado por todos los chicos pero muy eficiente, el Sacamoco, que te permite tal cual su nombre lo indica, liberar su naricita cuando está congestionada.


Con respecto al óleo calcáreo o al aceite, debo ser sincera y decirte que si bien es lo más económico y los pediatras lo recomiendan, para mí es mejor el sistema de las toallitas para bebés. Esto lo tenés que charlar con el pediatra, te recomiendo empezar con el aceite, pero una vez que lo termines, si lo podés hacer, económicamente hablando, te recomiendo las toallitas porque donde cayó una gota de aceite u óleo calcáreo nunca salió la mancha. Por otro lado, al ponerlo con un trocito de algodón, el algodón desprende pelusa que luego tendrás que sacar.


Te soy sincera y te digo que lo consultes porque hay pediatras que consideran usar estas toallitas cuando el bebé es más grande porque quizás le produzca alguna alergia. La palabra de él es la más autorizada por lo tanto yo lo recomiendo por comodidad y practicidad por ejemplo cuando vas de visita a algún lado.


Es conveniente que tengas ya comprada una mamadera. Esto es por las dudas porque seguro le darás pecho, pero existe la posibilidad que tengas que hacer algún trámite y no puedas llevar a tu bebé, siendo en ese caso la solución la mamadera. Muchas mamás se sacan previamente un poco de leche y la dejan en la mamadera para de esta manera si deben dejar al bebé, la persona que se queda con el niño tenga esa leche para darle.


En caso que no la utilices de esta manera te quedará para usarla con agua o más adelante cuando ya tome leche común.


Prestá atención a lo siguiente, las mamaderas traen una tapita, esa tapita cuidala mucho, no la vayas a perder porque es la que sirve para cuando salís y te quedó un poco de leche que luego podés aprovechar y la función que cumple es no dejar que se derrame ese líquido (leche, agua, jugo, etc.). Te lo dice una mamá que una vez tuvo que comprar otra mamadera porque perdió la tapita.


Por último te recomiendo tener una toalla chiquita para varios usos: 1. Luego de mamar debe hacer el provechito, poné esa toallita sobre tu hombro porque seguro va a regurgitar y el olorcito no es de lo más bonito, 2. A veces cuando son muy chiquitos, toman la teta despacito o les cuesta un poquito prenderse al pezón, mientras tanto tu pecho va eliminando gotitas de leche, ahí es cuando la toallita también sirve, deberás en ese caso ponerla bajo tu pecho para que absorba esa leche y no te ensucies.

 

La mamadera y los chupetes debés hervirlos todos los días o día por medio hasta más o menos los tres meses del bebé.  A partir de allí, cada dos o tres días y más progresivamente.


Cuidado cuando un chupete cae al suelo u otro niño (como a veces pasa) juega a ponerlo en su boca, ¡no se te ocurra ponérselo directamente a su boca sin hervir o al menos pasar por agua caliente!, ¡tampoco chuparlo vos!.

 

Te doy un reconsejo que es para más adelante, alrededor de los tres meses del bebé, pero vos tenélo comprado para no enloquecer a último momento. Como te decía, alrededor de los tres meses el pediatra te va a recetar unas gotitas que van a aportar hierro a tu bebé. Él o ella la va a tomar de buen grado porque el saber es rico, lo que pasa es que seguramente goteará el dosificador o tu bebe lo saboreará y babeará un poquito produciendo una mancha en su ropa que no lograrás sacar sin el quitaoxido, elemento que conseguirás en la ferretería o algunas farmacias.  No dudo que este dato me lo vas a agradecer ya que a la ropa del bebé siempre le damos un trato preferencial. Debés  poner una gotita sobre la mancha antes de lavar y chau problema.

 

El babero es una prenda que cobra importancia cuando el bebé empieza el proceso de la dentición. Es ahí cuando se hace altamente necesario porque al babear constantemente, si no lo tiene puesto se le empieza a mojar la ropa.


Luego lo usarás bastante tiempo ya que lo utilizará a la hora de comer.


A mí siempre me gustaron, y de hecho me dieron buen resultado, dos modelos: el tipo poncho que se lo pasás como remera y el modelo que pasa sus bracitos y se anuda al cuello, en este último caso tiene además la ventaja de no girarse hacia atrás.


Te recomiendo tener entre tres y cuatro porque suelen necesitar lavado diario.

 

Hasta aquí tenés más o menos lo necesario para tu bebé, pero vos también requerirás de dos elementos importantes a saber: Protectores mamarios y toallas femeninas o apósitos. Obviamente los protectores mamarios son para el pecho y las toallas femeninas son porque cuando tenés parto natural, durante bastantes días luego del parto sufrirás unas pérdidas totalmente normales.


PUPY CUERDA

TIP 1: Como preparar el bolso para la internación?

Vamos a organizarnos en dos partes, una vos y otra tu bebé.


Para vos tenés que considerar la posibilidad de una cesárea, por lo tanto es preferible que te sobre, aunque en realidad son cosas que no ocupan demasiado lugar, el bolso te recomiendo que sobre la fecha de parto esté siempre cerca tuyo. 


Tenés que poner 3 bombachas, 2 corpiños, 3 camisones, 1 par de pantuflas y desodorante. Protectores mamarios (más adelante te explico para y porqué). Peine y un poco de maquillaje para estar hecha una Diosa cuando te vayan a visitar, porque cuando tenés a tu primer hijo las visitas son muchas, ya para el segundo son menos y a partir de ahí, el teléfono funciona a la perfección.


Con referencia al perfume, sinceramente te digo que siempre lo he llevado pero al final no lo usas porque lo primero que vas a hacer, y además te van a aconsejar, es poner el bebé a la teta y si te pones a pensar, como todos sabemos, el bebé te va a reconocer por el olor de tu piel y no por la del perfume.


La ropa del bebé es más sencilla. Lo primero que tenés que hacer es saber si el sanatorio provee de pañales y ropa. Este dato te lo va a dar la partera o el mismo sanatorio.


Si el sanatorio provee pañales y ropa solo tenés que pensar en la ropa para salir del sanatorio y en el chupete, el cual previamente deberás hervir.


Si vas a hospital o sanatorio que no provee pañales, deberás poner un paquete chico del tamaño “recién nacido”.


Si vas a hospital o sanatorio que no provee ropa  deberás poner:

al menos tres enteritos manga larga, sin piernas, medias, chupete y los gorritos de algodón que se venden para recién nacidos, cuya función es evitar que pierdan el calor ya que lo hacen por la cabecita.


Te va a faltar únicamente la ropa de salida que dependerá si estás en época de calor o de frío.


Haceme caso, averiguá con anticipación si el sanatorio provee de ropa para el bebé durante la internación porque hay muchos sanatorios que no lo hacen y te encontrás con el apuro de que alguien salga a buscar ropa como a mí me ha pasado porque no lo averigüé, considerando que nunca había llevado para los anteriores nacimientos y de repente me encuentro con la dulce enfermera que se acerca a mi habitación y me dice las siguientes palabras: ¡La beba es hermosa, me podría dar la ropita así la vestimos y ya se la traemos!. ¡Que momento!, yo no había llevado nada y por lo tanto lo único que pude hacer es entregarle la ropa que yo llevaba para la salida del sanatorio y llamar por teléfono a los familiares más cercanos para que vengan con ropa obviamente talle 0 para salvar la situación. Espero que a vos no te pase.


Con respecto al chupete te vas a encontrar una amplia gama de posibilidades, los hay redonditos o con forma anatómica, de silicona o de goma. Hay también unos un poco más sofisticados con forma de pezón. Tu bebé se va a adaptar al modelo que vos elijas, lo único que debes tener en cuenta es que sea del tamaño más chiquito.


Tené en cuenta que a lo mejor el uso del chupete no gusta a tu hijo y no te tenés que desesperar. A veces adquieren su uso de más grandecitos y otras veces lo agarran enseguida. Quizás te pase que nunca lo quiera.


Sinceramente creo, por lo menos en los casos que conozco, que este elemento te salva muchas veces porque logra entretenerlos bastante. Lo que te recomiendo es que tengas por lo menos dos porque hay chicos que se adaptan a uno solo y luego no aceptan otro que ese todo gastado y no muy higiénico por cierto.


Además, se te puede caer porque cuando son muy chiquitos se les salen muy fácilmente, y es un elemento que debe estar bien limpio ya que entra en contacto directo con su saliva.

 

Los protectores mamarios son muy importantes para vos por unos meses si es que tu bebé toma la teta.


Cuando damos de mamar, tus pechos producen la leche necesaria para tu hijo y te avisan que ya tiene que comer poniéndosete duros y empezando a eliminar un poco de leche. Esto produce que nuestro corpiño y obviamente ropa se mojen. Sinceramente no es muy agradable estar toda mojada, pero por suerte tenés soluciones.


Cuando yo tuve mi primer hijo estos protectores mamarios no existían y nuestra solución (que podés tomar si no podés comprarlos) era cortar pedacitos de toalla o cortar un protector diario y ponerlos en el corpiño. No lo hagas con algodón porque al perder pelusa, el bebé la va a chupar.


Los protectores mamarios son círculos que absorben la leche, de la misma manera que lo hacen las toallas femeninas.


PUPY CUERDA